Eaton: "Luchemos contra el amaño de partidos"

Eaton: "Luchemos contra el amaño de partidos"http://es.fifa.com/aboutfifa/organisation/footballgovernance/news/newsid=1564100/ (FIFA.com) Jueves 5 de enero de 2012 © Foto-net Cuando se cumple un año de su incorporación al cargo de Jefe de Seguridad de la FIFA, Chris Eaton ha hablado con FIFA.com sobre la dimensión que ha cobrado el amaño de partidos en todo el mundo, los progresos que está efectuando la FIFA en la lucha contra esta lacra y los objetivos de la organización. ¿Cuál es la misión del departamento de seguridad de la FIFA? Después de la Copa Mundial de Sudáfrica 2010, creamos un programa de ayuda a la investigación para combatir el amaño de partidos y la infiltración de delincuentes en la FIFA. Ni que decir tiene, la FIFA engloba las asociaciones [miembros], por lo que esta infiltración les incumbe también a ellas. En los últimos 12 meses, hemos creado un sistema para ayudar a la policía y demás organizaciones de investigación y persecución de delitos en la aportación de pruebas para procesar a las personas implicadas en el amaño de partidos. La manipulación de resultados puede acarrear repercusiones, y de hecho las tiene, para los clasificatorios de las competiciones de la FIFA, y podría tener consecuencias en los certámenes mundiales propiamente dichos. Como tal, socava la integridad general de nuestras competiciones. Sin embargo, la infiltración de criminales peligrosos en nuestras asociaciones y en el fútbol en general es el problema más apremiante. A la delincuencia organizada le interesa el amaño de partidos porque el fútbol atrae muchísimas apuestas. Los partidos de fútbol, y muy especialmente los internacionales, reciben más del 90% de las apuestas deportivas que se efectúan en el sudeste asiático. Mucha gente cree que la FIFA es una organización rica. Sin embargo, su riqueza no se acerca ni de lejos a la que poseen las organizaciones y los corredores de apuestas del mundo entero que están sacando tajada del fútbol. La FIFA no obtiene ningún beneficio de estas actividades ni puede ejercer influencia alguna sobre ellas; no tiene ni voz ni voto. La FIFA no está en contra de las apuestas ni del juego, pero, como víctimas involuntarias, animamos a los gobiernos a crear colectivamente algún tipo de mecanismo de control de las entidades de apuestas que no están reguladas, de manera particular en el sudeste asiático, donde el juego ilegal supera totalmente el reglamentado. Una investigación nacional sobre amaños de partidos en Italia, que lleva un año en marcha, ha descubierto ingresos fraudulentos por valor de hasta dos mil millones de euros en dos grandes organizaciones delictivas, la camorra y la mafia. Y recuerde: se trata de dinero digital. De manera que no existen trasferencias entre fronteras, ninguno de los riesgos ni problemas relacionados con la importación productos, ni tampoco grandes cantidades de personas a las que sobornar. Por lo tanto, hasta el momento, han corrido pocos riesgos y han obtenido pingües beneficios. ¿Es difícil destapar este tipo de tramas? El mayor enemigo es la ingenuidad, porque la gente piensa: “¿Quién va a intentar aprovecharse de un deporte tan maravilloso como éste?”. Pues la respuesta es que hay muchas formas de aprovecharse de él, y una de ellas es el amaño de partidos. Nuestra labor más importante consiste en prevenirlo, en crear un entorno hostil a los amañadores para que comprendan que vamos a por ellos, que vamos a desenmascararlos, que daremos a conocer sus nombres e investigaremos sus actividades en cualquier lugar del mundo. Uno de los mayores riesgos son los clasificatorios para la Copa Mundial, especialmente cuando los equipos contendientes piensan que no tienen ninguna posibilidad real de llegar al Mundial propiamente dicho. ¿Cómo se recaba este tipo de información? Lo que estamos haciendo es crear fuentes tanto en organizaciones delictivas como en el fútbol que nos aconsejen. El departamento de seguridad de la FIFA es pequeño y, por este motivo, depende del establecimiento de asociaciones muy concretas con los encargados de la ley y el orden. También necesitamos colaborar con las asociaciones y confederaciones en un acuerdo marco. Por ejemplo, contamos con un grupo de trabajo conjunto contra el amaño de partidos, que lleva funcionando en Kuala Lumpur desde el 1 de diciembre. En él participan dos empleados de la AFC y uno nuestro, un investigador especializado, y juntos se concentran en el amaño de partidos y en la lucha contra la corrupción en el sudeste de Asia. Otro investigador trabaja en Colombia, dedicado a todo el continente americano. Tenemos un investigador de lengua árabe en Jordania, que abarca Oriente Próximo y África, y un coordinador de investigaciones mundiales, que opera desde el Reino Unido y controla África y Europa. Se trata de delincuencia internacional –transcontinental, de hecho– organizada. Las huellas de los delincuentes de Singapur se pueden reseguir por toda Europa, África y Centroamérica. Por lo tanto, a las policías nacionales les resulta muy difícil investigar este fenómeno. Pero creo que los progresos que hemos visto este año son una buena indicación de que derrotaremos a los amañadores, y no albergo ninguna duda de que así será. ¿Se precisaría una especie de AMA (Agencia Mundial Antidopaje) en la lucha contra el amaño de partidos? No creo que necesitemos una AMA. Lo que necesitamos es capacidad para la investigación independiente en todos los deportes. La AMA se creó para que se ocupara de aquellos tramposos que hacen trampas para ganar. Aquí estamos hablando de delincuentes que sobornan a otros para que pierdan. Se necesita un código sobre los amaños de partidos. El mejor lugar para controlar el comportamiento ético en cualquier deporte es el ámbito donde éste se practica, en los clubes, en las federaciones y en los corazones y mentes de todos los participantes. ¿Está seguro de que se puede ganar la batalla contra el fraude? Por supuesto que sí. Llevo 40 años trabajando en investigación criminal y, en el ámbito internacional, 12 años con la Interpol, y todavía no me he topado con un criminal realmente inteligente. Te encuentras gente muchísimo más inteligente en la administración de la FIFA, por ejemplo. Sin duda, hay que abordar las cuestiones de estabilidad económica y vulnerabilidad de jugadores y árbitros. Conocemos casos de intimidación a los jugadores y posibles casos de asesinato de futbolistas que habían decidido no colaborar con criminales. En 2012, jugadores, árbitros y directivos tendrán un lugar al que acudir, incluso de forma anónima, para explicar su caso, y será así gracias a la puesta en marcha de un programa de amnistías, recompensas y líneas de contacto especialmente dedicadas a este tema. Dispondremos de un sitio web, de un número de teléfono y de una dirección electrónica exclusiva en todos los idiomas. Haremos todo aquello que favorezca a la persona que desee contarnos algo. Aquellos que acudan a nosotros podrán recibir una recompensa o la amnistía. Algunos jugadores se han visto comprometidos injustamente por sus compañeros de equipo o sus familias o por el entorno de sus clubes, y no veo razón alguna para que no se les ayude a volver a entrenarse y rehabilitarse y regresar al fútbol. Queremos que la gente del fútbol nos diga la verdad antes de que nosotros la descubramos, algo así como “habla antes de que te pillen”. ¿Es posible expresar en cifras la dimensión del problema de los amaños de partidos? Es muy difícil. Lo que se puede medir es la dimensión de los beneficios. El regulador italiano, por ejemplo, puede ver cada apuesta deportiva que se hace. Cada día, en Italia se apuestan en el deporte 4.200 millones de euros, el 92% de los cuales se concentra en el fútbol. Las instituciones italianas de apuestas legales creen que ellas gestionan el 30% del total de transacciones reales. Eso quiere decir que el 70% va a parar a corredores que no están regulados ni registrados, de manera que las apuestas futbolísticas en Italia ascienden a unos 12.000 millones al año. Y eso sólo en un país europeo. Calculamos que, en todo el mundo, se juegan entre 300.000 y 500.000 millones al año en deportes, incluidos, por supuesto, las carreras de caballos, el críquet, el fútbol y otros. ¿Está funcionando ya el programa de información de la Interpol? Comenzará oficialmente este año y estará presente en la primera competición internacional de la FIFA de 2012, la Copa Mundial Femenina Sub-20 de la FIFA. Se mantendrán conversaciones con jugadores y árbitros. El programa busca que el fútbol despierte y ponga resistencia. Ha llegado la hora de que el fútbol plante cara a los amañadores de partidos. ¿Cuál ha sido hasta la fecha la parte más alentadora o la más frustrante de su trabajo? Me anima muchísimo la creciente sensibilización sobre las manipulaciones de resultados que se está produciendo entre la comunidad futbolística. Noto que los jugadores quieren que todo salga a la luz. Hay futbolistas que han sido víctimas, jugadores con los que he hablado, que han jugado un partido con su país y, como sus compañeros les han pedido que ayuden a amañar ese partido y ellos se han negado, no han vuelto a jugar nunca más con su selección nacional. Hay casos escalofriantes de futbolistas que han pagado muy cara su honradez. Dos jugadores de la República de Corea se han suicidado por la vergüenza sufrida al recibir acusaciones de amaño. Las víctimas son los jugadores, los entrenadores y los administradores a los que se soborna en un deporte basado en el trabajo en equipo y el juego limpio. Siempre que se ponen en peligro tan altos ideales, la vergüenza es inevitable. Debemos darles respaldo y protección. ¿Cómo piensa hacerlo? No puedo pasarme la vida hablando con organizaciones policiales individuales. Necesitamos ampliar la búsqueda de soluciones hasta un ámbito mundial, por ejemplo hasta la Organización de las Naciones Unidas, o la Interpol y otras organizaciones internacionales de órganos colegiados que posean competencias aplicables a nuestro caso. Primero y principal, debemos conocer exactamente el tamaño del problema, que en parte es lo que la Interpol está evaluando en estos momentos. Nunca habíamos tenido tantas investigaciones nacionales funcionando al mismo tiempo como ahora, con cientos de jugadores en prisión y directivos bajo investigación. Si esto no es una llamada para que hagamos algo, no sé qué será. Hay hasta 50 investigaciones nacionales abiertas; o sea, un cuarto de las asociaciones miembros de la FIFA. Es alarmante. Hagamos algo ya. Luchemos contra esta lacra.