¿La Mala Suerte Existe?

¿La Mala Suerte Existe? Escrito por Jose Borda Viernes, 09 de Diciembre de 2011 18:28 En Colombia, a un árbitro asistente los aficionados lo han agredido 2 veces desde la tribuna con objetos contundentes, en partidos de primera división decisivos y diferentes, el resultado de dichos ataques fue la pérdida de puntos para los equipos locales, multa para la plaza y escándalos que se formaron alrededor de los incidentes. Como esta situación pocas veces le sucede a un árbitro, algunos de sus colegas creen que las circunstancias que vivió este asistente “son hechos de mala suerte”. Tipos de árbitros Los árbitros, por naturaleza buscan controlar y entender lo que sucede a su alrededor; de esta forma, se sienten más tranquilos y con mayores herramientas que les dan fortaleza para afrontar lo que venga. Existen dos tipos extremos de silbatos, los racionales, para quienes sólo existen las explicaciones científicas y lógicas; y los que tienen un pensamiento mágico, que creen en la “suerte”, tienen supersticiones y hacen rituales. Los racionales en algún momento se pueden topar con algo que la ciencia y la razón no les podrá explicar, es por ello, que la mayoría no se identifica con este tipo. Buena y mala Tener o buscar herramientas por parte de los silbatos para afrontar lo que los partidos les ponga en frente, implica conseguir estrategias de toda índole incluyendo la “suerte”. Entonces si existe la “suerte” ¿la mala suerte también debe existir? La única respuesta es sí, y aunque no tenga una explicación lógica y racional, mientras se crea en ella, esta es real. Debido a lo anterior los árbitros deben tomar medidas para dejar de hacer las cosas que causan “mala suerte”, para esto se deben examinar las acciones, los hábitos y los pensamientos desafortunados, de modo que se pueda aprender a evitarla. Aprenda a sortearla El primer aspecto para esto es, culpar a los demás, así sea justificado, esta es una de las acciones más desmotivadoras que el árbitro puede cometer. Al enfocarse en culpar a otras personas pone las cosas fuera de su control y así es como lo malo y negativo tiende a sucederle aún más. Fabricar excusas, es el segundo ítem, este hábito de la mala suerte es a menudo más sutil. Por ejemplo, un árbitro dice "como ya me han agredido, en el próximo o los próximos partidos me van a agredir nuevamente". Esto podría ser 100% exacto. Sin embargo, la solución, la cual es evitar agresiones, es ignorada por justificar el mal hábito de hacer excusas. Pensamientos positivos El tercer aditamento es esperar la suerte, este es quizás una de las peores costumbres ya que si el árbitro se confía en que la tiene y que a quienes le pasan las cosas malas son a los demás, cuando le suceda una acción adversa, no la va a saber asimilar. Por último no aprender de los errores es otra medida para evitarla, si desea la peor de las suertes entonces tiene que incurrir en las mismas equivocaciones una y otra vez. Los jueces deben asumir siempre que por la labor que ejercen tienen cierto papel en los desastres o calamidades que acontecen, así que se debe aprender a convivir con ellos y tratar de evitarlos, de esta manera se enfocará el pensamiento en los aspectos positivos y no en la "famosa mala suerte”.