Es el profesor de los árbitros de la Liga Salteña de Fútbol. Trabaja con una manera particular de concebir a la enseñanza.
La vida de Agustín Copa ya pertenece a la historia del fútbol de Salta. Desde la primaria le apasionó ese deporte. Luego tuvo un paso fugaz, entre los 14 y 15 años, en las inferiores de Pellegrini a mediados de los '70. Se destacaba como un aguerrido número 2, y hasta ahora sigue haciendo descalabro con los delanteros más “ají”.
Pero su historia en el arbitraje comenzó en 1975, cuando entró a trabajar en Casa de Gobierno y conoció a Javier Garnica. Siendo este último árbitro de la Liga del Valle, se lo llevó un día como asistente deportivo. Luego de unos años este mismo personaje es el que le dijo que debía ser árbitro. Así comenzó Agustín a estudiar el “Reglamento Pedro Escartín”, que era la norma que antes reglaba el oficio. Se fue a la modista, con tela comprada, para que le confeccionara el uniforme negro con las mangas y el cuello blanco, pues antes no los vendían en cualquier tienda las casacas. Estuvo dos años en la Liga del Valle. En el '80 Sergio Ten, muy amigote del presidente de la Liga Salteña, le dijo que andaba muy bien en el Valle, pero que era mejor dirigir en la capital. Lo probaron exitosamente en la competitiva divisional “B” y en el '81 hubo un recambio generacional por el cual se fueron los históricos y entró la nueva camada, entre ellos Copa, Segovia, Del Pino, Martínez, D'Antoni y tantos otros, se convirtieron entonces en la nueva generación de árbitros a partir del '81.
En el '89 dejó de dirigir. En el año '90 la Liga lo llamó como instructor de árbitros. Y comenzó entonces a hacerse cargo de la Escuela de Arbitros hasta la fecha.
No hay comentarios:
Publicar un comentario